La Cámara Federal porteña confirmó hoy el procesamiento del ex titular de la secretaría nacional antidrogas (SEDRONAR) Ramón Granero por la falta de controles desde ese organismo al ingreso de efedrina que tuvo como destino el narcotráfico. La medida deja a Granero al borde de ser enviado a juicio oral y público por el delito de introducción al país de materias primas destinadas a la fabricación de estupefacientes, habiendo efectuado una presentación correcta ante la Aduana y alterando posteriormente su destino de uso.
Servini de Cubría consignó que durante 11 años -entre 1999 y 2010- se importaron 55.900 kilos de efedrina, cuando en realidad bastan 156 kilos por año para atender la producción farmacéutica local de gotitas para los ojos o remedios para la gripe. En ese período, esa enorme cantidad de droga fue traída al país por sólo cinco empresas, entre ellas Unifarma, que aparece como aportante de fondos para la campaña electoral kirchnerista de 2007 que llevó a Cristina Kirchner al poder. Era de Ariel Vilán, socio de las víctimas del Triple Crimen de General Rodríguez, que apareció también muerto en un aparente suicidio.
La efedrina o las drogas sintéticas “cocinadas” en la Argentina eran enviadas de contrabando a México, donde se había prohibido la importación de efedrina. Vale decir que la efedrina es el principal componente de la produccion del crystal meth. Aquí fue Graciela Ocaña , como ministra de Salud, la que limitó la importación. El negocio prosperó, al punto que se instaló en la Argentina Jesús Martínez Espinoza, que fue condenado junto con Mario Segovia, el llamado “rey de la efedrina”, a 14 años de cárcel por desviar 9800 kilos de efedrina a México. Convengamos que el crystal meth es una droga de clase A cuya comercializacion en Estados Unidos está tan penada como la cocaina. J A T
VISTE LA PASTELITICA?
