ESCRITO POR TATIANA
Hola Rodrigo, te escribo porque me quedé bastante pensativa con el post que hiciste sobre tu amigo que se suicidó, quería contarte que leer eso me movió un montón de cosas dentro mío, estoy pasando por lo mismo y doy fe que se siente como si uno estaría muerto en vida. Perdés las ganas de absolutamente todo, la voluntad es nula, de salir a la calle, de trabajar, de estudiar, de relacionarte con la gente, te sentís una mierda básicamente y lo único que querés y necesitas es estar en la cama y que se termine el día rápidamente para poder volver a dormirte y apagar el mundo por unas horas.
Coincido con vos, en que la depresión es una enfermedad genética, en mi caso, hace dos años perdí a mi papá y eso me dejó bastante cagada a trompadas, yo soy chica todavía, y a veces siento que es mucho dolor para un solo cuerpo y para la edad que tengo. Siento que esta ”enfermedad” es algo que tiene que ver mucho con la infancia y con las cosas del pasado, cosas que no podemos borrar ni dejar ir, lo relaciono bastante con el resentimiento hacia las personas que alguna vez nos lastimaron, en mi caso tengo una madre depresiva y mi viejo era ezquizofrenico, alcoholico y depresivo también, yo nunca viví con él, pero soy muy sensible y siempre sentí su dolor a la par, lo mismo me pasa con mi mamá, por eso digo que la carga es muy fuerte.
Muchas veces necesito un abrazo y no sé como perdirlo. Nunca pensé ni pensaría en matarme, siento que todavía estoy a tiempo, de salvarme o de salir de esto, sólo le pido a Dios, a mi viejo, o alguien, en el más allá (si es que hay más allá) que me de fuerzas, que me ayude a levantarme. Un beso Rodrigo, me sentí muy identificada con esto.
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