TEXTO DE UNACHICAFINA
A quienes leen este blog hace bastante… a los históricos lectores de LANP desde hace dos años o más, no les suena a conocida esta historia? Bancar la forma en que este blog hace crítica (social, cultural, de arte) no es fácil; muchos se suman a la cresta de la ola, pero cuando los intereses se interponen la filiación con Rodrigo pasa a serles incómoda y poco cool…
Recuerdan a la editora de Elle, Ana Torrejón, cuando mandaba email de aprobación y en el momento que surgió el tema de la copiosa María Cher se mandó a guardar?Recuerdan cuando Adrián Villar Rojas elogiaba el blog y a su escritor por su anti-institucionalidad y su ataque al status quo, y luego cuando se cuestionó éticamente el tratamiento que le daba de sus colaboradores nunca más? Y hubo otros personajes similares… Loperfido y Esmeralda, tan bohemios ellos, les encantaba lo anti-establishment, y Esme accedió a contestar el cuestionarios LANP… hasta que se convirtieron ellos mismos en establishment y Lopérfido never again.
Como muchos otros la Sra Barg mostró donde está su límite: en las buenas costumbre -no hablar de HIV, please! que pacata!- y en no joder con los vecinos que detentan un poquito de poder dada su visibilidad… Límites bastante precarios, pero límites al fin.
A los bien intencionados, a los que dicen amar el arte, y que todo lo demás en este blog es superfluo… comprensible, pero poco inteligente: como buen arte que quiere situarse a la vanguardia -tanto del pensamiento como la acción cultural- TIENE que incomodar, tiene que antagonizar, tiene que ser diferente, menos prolijo, menos correcto, menos superfluo, e insistentemente, incomodar, satirizar, poner en ridículo… Eso no significa odio… y entenderlo así es justamente, limitarse, censurarse. JAT!
MIRA LA PASTELA DEDICADA A JUAN CARLOS DISTÉFANO
